7 meses más tarde. Más kine, menos PNL

Bueno, realizo otra intentona de recuperación del blog siete meses más tarde. Han pasado unas cuantas cosas, y he realizado unos cuántos cambios, tanto en terapia como a nivel personal.
Los cambios en terapia para mi son constantes, cambio la forma o el "proceso" cada vez que comienzo a sentirme incómodo en algún aspecto. A veces ha sido en las entrevistas, otras en el mismo protocolo de kinesiología y otras muchas he tenido que cambiar aspectos personales para conseguir mayor fluidez. Y a estos cambios me remito.
Lo reconozco, a veces me agota el hablar y no "alcanzar" o vislumbrar un camino concreto al que comenzar a dirigirse para conseguir el objetivo, o incluso para plantear el objetivo. La PNL es una gran herramienta, no puedo negarlo. Pero las personas llegan a consulta viciadas en los contextos y lenguajes que usan para plantear los desequilibrios. Se dicen muchas cosas de carrerilla, sin pensar demasiado que es exáctamente lo que dicen y las emociones de las que hablan. Tienen la historia aprendida de principio a fin habiendo perdido casi el significado real. Insisto, la PNL es una gran herramienta con la que pulir, cambiar o incluso eliminar esa forma de actuar, pero me agota. Me agota el hecho de ver como los patrones son tan parecidos unos a otros. Saber que tan solo hay que tomar una decisión, y que la persona ha de llegar por si sola para realizar su propio camino en la cura o sanación, me agota.
Pero no nos confundamos, esto no lo considero en absoluto negativo, por lo contrario, desde que esto comenzó a sucederme me di cuenta que las cosas son muchas más simples de lo que parecen, así que al igual que "a grandes males, grandes remedios", "a males simples, simples remedios" y he obtenido mejor fruto realizando una pregunta tan simple como ¿cuándo vas a ponerte bien?, que dialogando y dialogando... Me he encontrado con que obtengo lo que necesito para trabajar más rápido realizando menos preguntas.
Así es como he conseguido transformar el supuesto agotamiento en rapidez y efectividad, dos factores en los que siempre trabajo para mejorarlo en terapia.
En resumen, más kinesiología y menos PNL.